Con la llegada de la recesión financiera muchas empresas se hallaron en una situación crítica donde la prioridad era sobrevivir a cualquier costo. Recortes de presupuesto, reducción de personal, inclusive poner en riesgo la calidad de los productos terminaron siendo las decisiones a tomar. Varias empresas sobrevivieron, otras no lo lograron pero, algunas a pesar de todo lograron crecer y a diferencia de las demás en lugar de emplear las estrategias que dicta el libro ellas optaron por hacerlo distinto, siendo la causa de su éxito.
El espejismo de la “solidez” empresarial cayó junto con la economía en 2008, arrastrando consigo los paradigmas vigentes. La reducción de costos y la flexibilidad de operaciones se tornan primordiales al momento de satisfacer la demanda eficientemente. Las nuevas tecnologías habilitan el nuevo modo de hacer las cosas, surgiendo nuevos conceptos como: virtualización de Servidores, virtualización del Escritorio (Desktop), computación Inmaterial, computación grid, computación “On Demand”, Computación de la Nube, websphere, y otros más.
El principal concepto del cual se derivan los demás es el on demand. Este se origina a partir de otros conceptos como outsourcing y servicio, desarrollándose un enfoque que busca la integración de todos los procesos de negocio de una empresa de principio a fin, haciéndola capaz de responder de forma flexible y ágilmente a cualquier cambio en la demanda de los clientes y afrontar las nuevas oportunidades y amenazas por venir. Comúnmente se le relaciona con el outsourcing en sí, pero la diferencia estriba que en el outsourcing se dimensiona para actuar de acuerdo a las mayores curvas de demanda de la empresa; en cambio con on demand se trabaja con un esquema menos rígido que como su nombre lo indica trabaja de acuerdo a las necesidades que posea la empresa en el momento permitiéndole gestionar mejor sus costos y ser mas competitivos pues sus gastos no se hallan sobredimensionados. Al hablar de computación on demand se hace referencia a las tecnologías de información que requiera la empresa cuando las emplea.
La principal función y ventaja de estos nuevos sistemas es la conversión de los costos fijos en variables: en el pasado era necesario la constante actualización de equipos tecnológicos, y un mantenimiento repetitivo de los mismos, que acarreaban una importante inversión, sin importar si hubiese o no productividad en la empresa. Actualmente la virtualización de Servidores, y escritorios permiten manejar, gestionar y arbitrar los cuatro recursos principales de una computadora (CPU, Memoria, Red, Almacenamiento) y así poder repartir dinámicamente dichos recursos entre todas las maquinas virtuales definidas en un computador central. De esta manera se nos permite tener varios ordenadores virtuales ejecutándose sobre el mismo ordenador físico al no estar estos físicamente restringidos a cada una de las terminales y redes internas o externas de la empresa.
La “computación en grid” implica que las empresas ponen a disposición todos sus recursos de tecnologías de información para aquellos que la necesitan cuando la necesiten, permitiendo el acceso a grandes cantidades de datos o capacidad de procesamiento. Esto es especialmente útil al momento de resolver problemas de diseño e ingeniería de productos, y análisis financieros, acelerándose la creación proyectos. La computación en nube está estrechamente relacionada con los sistemas grid, pues aunque consume los recursos informáticos necesarios en el momento que son empleados se evita así la necesidad de invertir en equipos tecnológicos y también la capacidad tecnológica ociosa, debido a estar estos recursos suministrados por un proveedor, guardando cierto parecido con el servicio eléctrico, sin embargo esta dependencia puede perjudicar a la empresa de no contarse con un servicio adecuado a sus requerimientos.
A medida que se hace más competitiva una empresa es más necesaria la capacidad de crear y gestionar nuevas estrategias y productos que le permitan estar al nivel de las necesidades del mercado. Pero esta capacidad puede verse mermada al tener que dedicarle valioso tiempo y recursos financieros y humanos a tareas improductivas, debido a la cada vez mayor complejidad de los sistemas informaticos. Surge entonces la necesidad de sistemas de información autónomos que puedan gestionarse y dirigirse de la misma forma que hace el cuerpo humano, permitiéndose dejar por sentado elementos como seguridad y protección de los sistemas ante las siempre latentes amenazas de virus y/o usuarios no deseados, la actualización de software y otros elementos que por lo general terminan desviando los esfuerzos y recursos empresariales. Aunque harán falta varios años de investigación y desarrollo hasta alcanzar estas tecnologías autónomas, en el mercado ya existen aplicaciones como Rapid Restore: capaz de restaurar la información y aplicaciones después de un fallo en el computador. Al utilizarla, el tiempo promedio en restaurar un ordenador se reduce de 2 horas a 30 minutos (haciendo declinar los costos de soporte técnico computarizado en un 52 %).
Son incontables los beneficios que este tipo de tecnologías proporciona, y estos van desde un menor nivel de preparación y capacitación para los usuarios; la reducción de la inversión infraestructura; menor dependencia de la intervención humana para mantener los sistemas y por tanto reducir dramáticamente los gastos que estos normalmente conllevarían; máximo empleo de los recursos a disposición al momento de gerenciar estrategias y proyectos; mayor agilidad en la investigación y desarrollo de productos; mayor flexibilidad para actuar con respecto a la demanda del entorno; menores costos operativos innecesarios entre infinidad de otros beneficios más reducen el riesgo a solo el factor humano.
El impacto que estas tecnologías traen consigo cambian radicalmente la manera de hacer negocios y para dar ejemplo de ello: ya no hace falta estar en la oficina o cargar una laptop consigo para desarrollar proyectos pues desde cualquier computador(o hasta el mismo) incontables usuarios pueden trabajar sin necesidad de emplear los mismos datos y limitarse por los recursos físicos, ya que para ser verdaderamente competitivo es necesario adaptarse casi instantáneamente a las condiciones que establece la cada día más volátil demanda.
El principal concepto del cual se derivan los demás es el on demand. Este se origina a partir de otros conceptos como outsourcing y servicio, desarrollándose un enfoque que busca la integración de todos los procesos de negocio de una empresa de principio a fin, haciéndola capaz de responder de forma flexible y ágilmente a cualquier cambio en la demanda de los clientes y afrontar las nuevas oportunidades y amenazas por venir. Comúnmente se le relaciona con el outsourcing en sí, pero la diferencia estriba que en el outsourcing se dimensiona para actuar de acuerdo a las mayores curvas de demanda de la empresa; en cambio con on demand se trabaja con un esquema menos rígido que como su nombre lo indica trabaja de acuerdo a las necesidades que posea la empresa en el momento permitiéndole gestionar mejor sus costos y ser mas competitivos pues sus gastos no se hallan sobredimensionados. Al hablar de computación on demand se hace referencia a las tecnologías de información que requiera la empresa cuando las emplea.
La principal función y ventaja de estos nuevos sistemas es la conversión de los costos fijos en variables: en el pasado era necesario la constante actualización de equipos tecnológicos, y un mantenimiento repetitivo de los mismos, que acarreaban una importante inversión, sin importar si hubiese o no productividad en la empresa. Actualmente la virtualización de Servidores, y escritorios permiten manejar, gestionar y arbitrar los cuatro recursos principales de una computadora (CPU, Memoria, Red, Almacenamiento) y así poder repartir dinámicamente dichos recursos entre todas las maquinas virtuales definidas en un computador central. De esta manera se nos permite tener varios ordenadores virtuales ejecutándose sobre el mismo ordenador físico al no estar estos físicamente restringidos a cada una de las terminales y redes internas o externas de la empresa.
La “computación en grid” implica que las empresas ponen a disposición todos sus recursos de tecnologías de información para aquellos que la necesitan cuando la necesiten, permitiendo el acceso a grandes cantidades de datos o capacidad de procesamiento. Esto es especialmente útil al momento de resolver problemas de diseño e ingeniería de productos, y análisis financieros, acelerándose la creación proyectos. La computación en nube está estrechamente relacionada con los sistemas grid, pues aunque consume los recursos informáticos necesarios en el momento que son empleados se evita así la necesidad de invertir en equipos tecnológicos y también la capacidad tecnológica ociosa, debido a estar estos recursos suministrados por un proveedor, guardando cierto parecido con el servicio eléctrico, sin embargo esta dependencia puede perjudicar a la empresa de no contarse con un servicio adecuado a sus requerimientos.
A medida que se hace más competitiva una empresa es más necesaria la capacidad de crear y gestionar nuevas estrategias y productos que le permitan estar al nivel de las necesidades del mercado. Pero esta capacidad puede verse mermada al tener que dedicarle valioso tiempo y recursos financieros y humanos a tareas improductivas, debido a la cada vez mayor complejidad de los sistemas informaticos. Surge entonces la necesidad de sistemas de información autónomos que puedan gestionarse y dirigirse de la misma forma que hace el cuerpo humano, permitiéndose dejar por sentado elementos como seguridad y protección de los sistemas ante las siempre latentes amenazas de virus y/o usuarios no deseados, la actualización de software y otros elementos que por lo general terminan desviando los esfuerzos y recursos empresariales. Aunque harán falta varios años de investigación y desarrollo hasta alcanzar estas tecnologías autónomas, en el mercado ya existen aplicaciones como Rapid Restore: capaz de restaurar la información y aplicaciones después de un fallo en el computador. Al utilizarla, el tiempo promedio en restaurar un ordenador se reduce de 2 horas a 30 minutos (haciendo declinar los costos de soporte técnico computarizado en un 52 %).
Son incontables los beneficios que este tipo de tecnologías proporciona, y estos van desde un menor nivel de preparación y capacitación para los usuarios; la reducción de la inversión infraestructura; menor dependencia de la intervención humana para mantener los sistemas y por tanto reducir dramáticamente los gastos que estos normalmente conllevarían; máximo empleo de los recursos a disposición al momento de gerenciar estrategias y proyectos; mayor agilidad en la investigación y desarrollo de productos; mayor flexibilidad para actuar con respecto a la demanda del entorno; menores costos operativos innecesarios entre infinidad de otros beneficios más reducen el riesgo a solo el factor humano.
El impacto que estas tecnologías traen consigo cambian radicalmente la manera de hacer negocios y para dar ejemplo de ello: ya no hace falta estar en la oficina o cargar una laptop consigo para desarrollar proyectos pues desde cualquier computador(o hasta el mismo) incontables usuarios pueden trabajar sin necesidad de emplear los mismos datos y limitarse por los recursos físicos, ya que para ser verdaderamente competitivo es necesario adaptarse casi instantáneamente a las condiciones que establece la cada día más volátil demanda.
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